Me gusta escribir literatura barata y comer bombones hasta las 4 de la madrugada. Echar un pitu sentada en el tejado y observar el amanecer a su lado. Odio llorar, los helados de limon y esa sensacion que tienes cuando estas "enamorada". Ama(ba) a 4 personas que juegan a ser dios e idolatro a Pablo Neruda y Paulo Coelho. Ver el fuego me tranquiliza, parar el reloj para creer que el tiempo no pasa y escuchar la musica a tope, rebentandome los oidos, para sentirme un poco mas cerca de ese dia que tan atras quedo. Un cigarrillo de madrugada mirando el mar, disfrutando del olor a nicotina mezclado con la suave brisa marina, y tu mano en mi cintura, por supuesto. Odio la frialdad aunque yo soy la primera que tiene el corazón congelado. Aborrezco a las gaviotas, los martes a las 10 de la mañana, los odio, no puedo vivirlos. Gran fobia a las arañas, no podría vivir sin mi singular gato. Un cafe a las 7 de la tarde en la terraza de siempre, soñar hasta ver la realidad completamente distosionada, un trago de wiskie y para la cama a seguir soñando(con él). Tirar fotos antiguas y quemar recuerdos. Hacer poesia, sobre tu cuerpo. Perder el norte con tus te quiero, llover miradas, secuestrar tus escalofrios. Dibujarnos infinitos en la barriga. Obsesionada de las pulseras de colores y los collares de cruzes(aunque aun no me he puesto ninguno). Intento desde hace tiempo encontrar una dirección que seguir, pero cuando el dedo no para de temblar, es complicado escoger el camino adecuado.

jueves, noviembre 24

Que me la resbala si follas o fallas.

Esos días de invierno, en concreto los sábados, que te quedabas con el en casa o en el cine, que agradecias tener su compañia en esas tardes lluviosas en las que ni salir con tus amigas de fiesta a la discoteca de turno te parecia interesante. Las tardes a su lado, en la que parecia que solo el calor existia para nosotros, el calor y el cielo(por si acaso lo dudabais), en la que tus labios eran mi alimento preferido y tu pecho mi almohada mas mullida. Que fuimos dos desconocidos que jugaron a amarse sin palabras, solo con echos; que qusimos crear una historia perfecta que no hizo mas que acabar en trajedia y terminar como empezo, siendo nosotros(los protagonistas) dos desconocidos que ni la mirada se pueden dirigir.
Fuimos la mezcla perfecta. Creamos los ambientes perfectos, las noches perfectas. El ardor del fuego se quedo corto en comparacion a como quemaba el roce de nuestras pieles, creamos universos con cada orgasmo y hicimos del invierno el verano perfecto. Fuimos la envidia de la lujuria y el placer no quiso abandonarnos por muy distantes que nos encontraramos. Que aprendimos a querer, si, pero tambien a no importarnos la diferencia entre follar y fallar.

1 comentario:

  1. Es malo eso de no saber la diferencia...
    Me gustó el texto.
    Un saludo!

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